Memorias de un calamar

Los calamares tenemos poca memoria y mucha tinta. Seguramente una cosa es consecuencia de la otra, y así podemos escribir lo que de otro modo olvidamos.

lunes, abril 10, 2006

Lobo Lopez

Hay historias que empiezan con el sol y acaban con la luna,
Esta empezó con los Deat cab for cutie, y acabó con Cold Play.
Harto de ser hielo, intentó ser agua.
Quiso volar, pero no arriesgó como Icaro.
Mientras a que a Icaro se le deshacían las alas,
A él se le helaba hasta el aliento.
Y no es que fuera invierno, era primavera.

El Sr. Pienso, volvió a subir por el pasillo,
era la cuarta vez que realizaba el itinerario,
cinco pasos, parar, dos pasos mas, rascarse
la ceja.
Si sus pies iban a dos por hora, y la cabeza iba a mil.
Hasta notó un pequeño humo salirle por la orejas.
Pero no sacaba nada en claro, sobre un mismo hilo conductor
aparecían siempre diferentes opciones.

La Sra. Amada, esperaba una decisión, un gesto,
una sonrisa, algo donde cogerse.

Pero el Sr. Pienso volvió a bajar el pasillo, se fue al comedor,
Se agachó y apretó el PLAY.

En una habitación demasiado vacía, y con las persianas bajadas,
sonaba “Speede of Sound” (Cold Play) con demasiado “reverb”.